Segunda prioridad

Me he pasado toda la vida siendo la segunda prioridad.

“El trabajo esta primero”

Desde pequeña me quedaba dormida frente a la televisión, esperando que mis papás
llegaran. Solo para después encontrarme con que preferiría que no hubiesen llegado, por el mal humor de la tarde.

No tengo quejas.

Nunca me ha faltado nada…

Tal vez…

Tiempo.

Pude soportarlo antes, y puedo soportarlo ahora.

Pero…

Jamás creí que volvería a ser tan ilusa, como para esperar entusiasmada a un amigo, solo para conversar e ir por un helado, y volverme a quedar dormida en el sofá.

Es gracioso. No sé porque me importa tanto.

Es solo que me hace sentir patética.

Y quizás lo soy…

Dulces Sueños

No sabes lo increíble que es sentirte dormir,
Ver lo tranquilo que recuperas las fuerzas perdidas después de la euforia.
Tanto que no puedo dormir
Y es que no quiero perderme un segundo, un respiro.

Cada vez que te mueves me da un miedo horrible
Porque no quiero despiertes,
Quiero seguir viéndote dormir.

Es contradictorio…

Porque al mismo tiempo,
No veo la hora de que despiertes
Para ser lo primero que tus ojos vean.

Se siente extraño…

Que de algo tan trivial, se pueda escribir
Como si fuese una novela.

No sabes lo increíble que es sentirte dormir,
Ver lo tranquilo que recuperas las fuerzas perdidas después de la euforia.
Pero es aun mejor…

Que pueda ser así todos los días.

No necesito ponerle nombre a esta mierda

Hoy, casi todo me fastidia.

Es un día de mierda y a veces pienso que no voy a sobrevivirlo.

Me enjuago los labios con vino blanco, haber si así dejan de partirse.

Ojala funcionara con el cerebro, y es que se me parte la cabeza de rabia, de ira, de hastío.

AI SHITERU!!

Siento como si estuviera en una nube y no quiero volver a la realidad.

Como si los problemas no existieran, como si la guerra, las peleas y la rutina, importaran menos que una mota de polvo en el suelo.

Y es que estar contigo es como estar soñando constantemente.

Son esos momentos en el día en que, a pesar de la vorágine de cosas por hacer, el mundo se detuviera.

Y de hecho lo hace, porque en mi cabeza no queda espacio más que para pensar en una cosa…


TE AMO, ÁLVARO!!

Independencia

Y supongo que a todos les llega su momento de salir de la casa familiar y comenzar su propia vida. Pero es complicado cuando tienes que estudiar, y los horarios de la Universidad no te dejan tiempo para trabajar para poder mantenerte tu mismo.

Y es que algunos padres, por medio al síndrome del nido vacío, retardan esta partida lo más que puedan.

No es mi caso, pero debe ser genial que tus padres te estimen tanto como para querer quedarse contigo en todas las etapas de tu vida.

Es horrible cuando cada cierta cantidad de días a raíz de una discusión por nimiedades domésticas surge el “si no te gusta te vas”. Supongo que es normal, pero no cuando llevan diciéndotelo desde que tienes 14 años.

Aunque con el tiempo, esa frase se empieza a volver más grave, sobre todo cuando estas ocupado con las actividades y tareas de la Universidad, a nivel de “ya eres mayor de edad, puedes trabajar y arrendarte un departamento, para que nadie te moleste”

Es que en esas condiciones ¿No creen que si pudieras irte, te irías sin siquiera mirar atrás?

Yo lo haría… Si pudiera.

No es que se trate de ser una persona malagradecida, pero este tipo de conflictos hacen que terminen dándote ganas de tirar la carrera por la ventana, que se jodan las becas y créditos que te costaron 4 años de esfuerzo conseguir, con tal de trabajar y poder irte para darle en el gusto al acusador.

Y es que yo, de verdad lo haría…

Y en realidad estoy comenzando a considerarlo seriamente.